Corbán ¿Ofrendas o Sacrificios?
Marcos 12:32-33
32 Entonces el escriba le dijo: Bien, Maestro, verdad has dicho, que uno es Elohim, y no hay otro fuera de Él;
33 y el amarle con todo el corazón, con todo el entendimiento, con toda el alma, y con todas las fuerzas, y amar al prójimo como a uno mismo, es más que todos los holocaustos y sacrificios.
Cuando hablamos de sacrificios, no podemos dejar de pensar en el sufrimiento que tuvo que padecer Yeshúa (nuestro Mesías), porque solo por medio de Su muerte es que podemos recibir el perdón por nuestros pecados y recibir vida eterna, (y más que eso), podemos tener una vida eterna en comunión con nuestro Creador.
Sin embargo, al hablar de sacrificios, también podemos pensar en una serie de mandamientos que Yahweh ordenó a Su pueblo y que se encuentran descritos en la Torá (llamada por muchos como Ley).
Y con relación a esto me parece muy importante que tengamos claro que los sacrificios ordenados por Yahweh, son solo una parte de lo que se encuentra en la Ley (o Torá), siendo que muchos pueden pensar que la Ley está compuesta casi en su totalidad por los mandamientos de sacrificios, cuando hay mucho más que esto.
Por otro lado, el pensar en todo lo ordenado por Yahweh en Su palabra, puede hacer que nos preguntemos las razones por las que Yahweh ordenó todo lo relacionado con los sacrificios.
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Sabemos que los pensamientos de Yahweh son mucho más grandes que los nuestros, y no tenemos la capacidad de comprender con detalle todo lo que Yahweh ha establecido en Su Bendita Palabra.
Sin embargo, podemos reconocer algunas de las razones de por qué Yahweh nos pide algunas cosas.
Y en esta presentación hablaremos de alguna de estas razones.
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El nombre Vayicrá puede ser traducido como “y llamó” debido a que esta porción comienza diciendo que, Yahweh llamó a Moshé.
Y luego comprobamos que era para darle los mandamientos acerca de las ofrendas y sacrificios.
Vayicrá (Levítico) 1:1-2
1 Llamó Yahweh a Moshé, y habló con él desde el tabernáculo, diciendo:
2 Habla a los hijos de Israel y diles: Cuando alguno de entre vosotros presente corbán [ קָרְבָּן – ofrenda] a Yahweh, de ganado vacuno u ovejuno haréis vuestro corbán [ofrenda].
Como vemos (comenzando el pasaje), Yahweh llamó a Moshé para decirle como deberían ser hechas las ofrendas o sacrificios que el pueblo trajera delante de Él.
Cuando leemos los pasajes de las Escrituras que nos hablan sobre ofrendas y sacrificios, entendemos como “sacrificio” el acto de “sacrificar” (valga la redundancia) a algún animal ofrecido a Yahweh, principalmente por causa del pecado.
Sin embargo, lo que muchas personas desconocen es que la palabra hebrea “corbán” es usada en las Escrituras para referirse tanto a las ofrendas como a los sacrificios.
Con esto podemos ver que las dos cosas (ofrendas y sacrificios) entran en una misma categoría, que define aquello que es ofrecido a Yahweh (principalmente por medio de un sacerdote) y que en hebreo es llamado Corbán.
Muchas personas piensan que hoy podemos (o debemos) ofrendar, pero no sacrificar, y aunque parece tener sentido según algunos argumentos, es bueno que entendamos las razones por las que Yahweh habló a Moshé acerca de cada Corbán.
Primero que nada, debemos tener claro que la sangre de los animales sacrificados no trae salvación a ningún hombre, sin embargo, es interesante notar que la carta a los hebreos nos dice que, la sangre de animales santifica para la purificación del cuerpo.
Ivrim (Hebreos) 9:13-14
13 Porque si la sangre de los toros y de los machos cabríos, y las cenizas de la becerra rociadas a los inmundos, santifican para la purificación del cuerpo [la carne en sentido material],
14 ¿cuánto más la sangre del Mesías, el cual mediante el Espíritu eterno se ofreció a sí mismo sin mancha a Elohim, limpiará vuestras conciencias de obras muertas para que sirváis al Elohim vivo?
Me parece importante repetir que, la sangre de animales no sirve para librarnos de la condenación eterna, esto, solo lo hace la sangre de Yeshúa, porque la Sangre de Yeshúa limpia y purifica lo más importante, que es nuestro corazón.
Pero al mismo tiempo, el libro de hebreos (escrito después de la muerte y resurrección de Yeshúa) nos dice que la sangre de animales sacrificados sirve para la purificación de nuestra carne.
Y en contraste de lo que muchos pueden estar pensando, el apóstol Shaúl, hizo sacrificios (aun) después de aceptar a Yeshúa como su salvador.
Maasei (Hechos) 21:26
26 Entonces Shaúl (Pablo) tomó consigo a aquellos hombres, y al día siguiente, habiéndose purificado con ellos, entró en el templo, para anunciar el cumplimiento de los días de la purificación, cuando había de presentarse las ofrendas [de varios sacrificios] por cada uno de ellos.
Cuando las personas leen el capítulo 21 del libro de Hechos, no suelen tomar en cuenta que Shaúl hizo un voto Nazareo que finaliza con el sacrificio de varios animales.
El voto Nazareo lo encontramos descrito en Bemidbar (números) 6, donde se detallan todos los sacrificios que debían hacerse al finalizar este voto.
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Y con el propósito de presentarles una explicación más detallada, sobre la relación de Shaúl con los sacrificios mencionados en el libro de los Hechos en el capítulo 21, te invito a que veas nuestro estudio:
Acerca de los Sacrificios de Animales por los Pecados
Volviendo a lo mencionado anteriormente sobre el significado de la palabra Corbán, que representa tanto ofrendas como sacrificios, podemos pensar que todo lo que es Corbán, sirve para acercarnos a Yahweh.
Y la forma como cada Corbán nos acerca a Yahweh es que nos lleva al reconocimiento de nuestras ofensas y de la dependencia que tenemos de Yahweh, donde debemos mostrar gratitud y reconocer nuestros pecados.
Por lo que más allá de la importancia ritual que tienen los sacrificios para Yahweh, debemos entender que – la intención con la que se hacen – siempre ha sido fundamental, al igual que todo lo que hacemos en obediencia a Yahweh.
Por esta razón podemos encontrar pasajes como el siguiente:
Yeshayahu (Isaías) 1:11-12
11 ¿Para qué Me sirve, dice Yahweh, la multitud de vuestros sacrificios? Hastiado estoy de holocaustos de carneros y de sebo de animales gordos; no quiero sangre de bueyes, ni de ovejas, ni de machos cabríos.
12 ¿Quién demanda esto de vuestras manos, cuando venís a presentaros delante de Mí para hollar Mis atrios?
Y algo que podemos notar en los versos siguientes, es algo que, si no se analiza cuidadosamente, puede generar el mismo pensamiento equivocado que tienen algunos sobre Las Fiestas y las Leyes de Yahweh.
Muchos piensan que las Fiestas y las Leyes de Yahweh son fiestas y leyes judías, pero en realidad (con el paso del tiempo) los lideres judíos (tomando como fundamento la Torá) fueron modificando sus costumbres según su preferencia, añadiendo y quitando mandamientos.
Y uno de los ejemplos más conocidos, es la tradición de encender velas antes del inicio de Shabat, que no fue ordenado por Yahweh.
Y continuando con el pasaje anterior podemos ver algo similar, donde Yahweh hace mención de que las cosas que hacia el pueblo (aun siendo mandamientos ordenados por Él) fueron descritos como cosas propias del pueblo, (semejante a algunas fiestas judías en la actualidad) porque lo hacían de la forma incorrecta, siendo en este caso la intención que tenían.
Yeshayahu (Isaías) 1:13-15
13 No me traigáis más vana ofrenda; el incienso Me es abominación; luna nueva y día de reposo, el convocar asambleas, no lo puedo sufrir; son iniquidad vuestras fiestas solemnes.
14 Vuestras lunas nuevas y vuestras fiestas solemnes las tiene aborrecidas Mi alma; Me son gravosas; cansado estoy de soportarlas.
15 Cuando extendáis vuestras manos, Yo esconderé de vosotros Mis ojos; asimismo cuando multipliquéis la oración, Yo no oiré; llenas están de sangre vuestras manos.
Muchas veces las personas se preguntan por qué nos va mal en la vida, y muchos se comparan con las personas (que sin temor a Yahweh) tienen prosperidad y aparente felicidad.
Pero estas personas sino se arrepienten serán condenadas en el gran juicio final, por lo que no debemos anhelar su situación.
Por otro lado, el problema que muchos tienen en nuestros días, es que no están comprendiendo que el vivir por fe significa establecer un compromiso con nuestro Creador, por medio de Yeshúa.
Lo que es comparado en las Escrituras como una relación de matrimonio, por eso tantas veces Yahweh describe a Su pueblo como una adúltera.
Y actualmente muchos, no buscan tener una relación personal con Yahweh, condenándose a sí mismos porque están adorando o idolatrando las cosas del mundo (o a sí mismos).
Sin embargo, hay otros que “si” quieren tener una relación con Yahweh, pero una relación sin compromiso, es decir, sin trabajar para Él, y mucho menos esforzarse para servirle.
Cuando las personas pretenden tener comunión con Yahweh y tener experiencias “sobrenaturales” sin comprometerse con Yahweh, es algo similar a la fornicación o el adulterio.
Porque si alguien quiere tener comunión con Yahweh sin un compromiso sólido (similar al de un matrimonio), termina actuando como un hombre o una mujer que tienen relaciones con otra persona, “solo para obtener placer”, y no para compartir una vida de familia dentro de un matrimonio, cayendo de esta manera en la fornicación o el adulterio.
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Volviendo a los (“קורבנות”) korbanot (Corbán en plural), es importante notar también que, no todos los sacrificios fueron ordenados por causa del pecado.
Podemos comprobarlo en el capítulo 3 de Vayicrá
Vayicrá (Levítico) 3:1-2
1 Si su ofrenda fuere sacrificio de paz, si hubiere de ofrecerla de ganado vacuno, sea macho o hembra, sin defecto la ofrecerá delante de Yahweh.
2 Pondrá su mano sobre la cabeza de su ofrenda, y la degollará a la puerta del tabernáculo; y los sacerdotes hijos de Aarón rociarán su sangre sobre el altar alrededor.
Con esto, debemos notar que el argumento de que, no debemos sacrificar más, porque Yeshúa ya pagó por nuestros pecados, no debe ser usado sin analizar bien todo lo que simbolizan los sacrificios.
Como mencioné antes, la sangre de animales no es capaz de redimirnos de nuestros pecados.
Pero son un medio para que valoremos los sacrificios, “no” como un pago por nuestros pecados, sino como una muestra de que reconocemos nuestros pecados y nuestra dependencia de Yahweh, dándole algo que nos cuesta, y donde podamos ser conscientes del sufrimiento que ocasionan nuestros pecados.
En la actualidad nos encontramos dispersos, y no estamos viviendo en la Tierra escogida por Yahweh (Israel) además de no tener un Templo, por lo que no tenemos un mandamiento específico (en nuestra condición) para hacer sacrificios de animales.
Sin embargo, hay otras maneras de manifestar que reconocemos nuestros pecados y nuestra dependencia de Yahweh, lo que se puede hacer de varias maneras, pero para una muestra genuina, no basta con decirlo, hay que demostrarlo.
Necesitamos amarle como nos dice el pasaje que leímos al inicio…
Marcos 12:33
33 … con todo el corazón, con todo el entendimiento, con toda el alma, y con todas las fuerzas, y amar al prójimo como a uno mismo.
Esto implica que debemos aprovechar nuestro tiempo y recursos, con el mismo anhelo (o más) del que se tiene cuando tenemos planes de formar una familia, o cualquier proyecto que nos apasione.
Yahweh no quiere que cumplas tus sueños, lo que Yahweh quiere es obediencia, y con eso, obtendremos algo que no se compara a nada temporal de esta vida.
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Los sacrificios en la antigüedad podían ser vistos, como un auto-castigo, de manera que, reconociendo nuestra maldad, Yahweh aplique Su misericordia con nosotros, y nos conceda el perdón por gracia, pero no como la gracia que se predica en muchos lugares en nuestros días, donde se toma a la ligera, como si lo sufrido por nuestro Mesías fuese poca cosa.
Así mismo, debemos entender el esfuerzo necesario para servir a Yahweh – obviamente no con intención de ser salvos – sino con el propósito de sentir y reconocer que todo lo que hagamos por Él y para Él, siempre será poco, comparado con lo que Él nos está ofreciendo, que es una vida plena en la eternidad.
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Hermanos, Yahweh quiere nuestra felicidad, pero más importante que eso, Él quiere que entendamos que Su voluntad es perfecta, y que nos conviene apagar todo el orgullo que podamos tener, dependiendo plenamente de Él.
Yahweh no quiere que vivamos agobiados, o preocupados por lo que pueda pasar, pero otra cosa muy distinta es pensar que Yahweh quiere que tengamos una vida relajada, cuando el mundo está en guerra.
Hay muchas personas que no son conscientes, pero la guerra espiritual que existe, se está intensificando cada día, con discursos por todas partes en contra de obedecer las palabras de Yahweh.
Necesitamos despertar, y discernir lo que está pasando en el mundo, y como nos manda Yahweh en Su palabra:
Amar a nuestro prójimo como a nosotros mismos.
Shabat Shalom.
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Recuerda La mies es mucha y los obreros pocos, apóyanos.
Parashá Infatil aquí