¿Aparentar o Representar?
Timoteus Alef (1 Timoteo) 2:8-10
8 Quiero, pues, que los hombres oren en todo lugar, levantando manos santas, sin ira ni contienda.
9 Asimismo que las mujeres se atavíen de ropa decorosa, con pudor y modestia; no con peinado ostentoso, ni oro, ni perlas, ni vestidos costosos,
10 sino con buenas obras, como corresponde a mujeres que profesan piedad.
La mayoría de las veces, cuando se habla de la fe, las personas se suelen enfocar en lo que creemos, pensamos o sentimos, y algunas otras veces el enfoque está en nuestro comportamiento.
Pero con respecto a la ropa que usamos o a la forma en que nos vestimos, no se suele pensar mucho, aun siendo algo en lo cual no suele habar mucho consenso.
Y es que las Escrituras no tiene mandamientos específicos cuando se trata de nuestra vestimenta. Y sabemos que lo que hay en nuestro corazón es más importante que nuestra apariencia, sin embargo, esto no quiere decir que no estén relacionadas y que es importante conseguir una armonía entre las dos cosas.
Por esta razón vamos a tratar este tema en esta presentación, con la intención de tener una mejor perspectiva sobre la importancia de nuestra vestimenta y entender la diferencia entre aparentar o representar.
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Shabat Shalom y bienvenidos a esta nueva presentación, donde analizaremos la porción de la Torá llamada parashá
Tetzavé, que se encuentra en el libro de Shemot 27:20-30:10.
En esta porción de la Torá encontramos (al igual que la parashá anterior) más instrucciones sobre la construcción de algunos elementos del Tabernáculo, entre los que se encuentran el altar del incienso, el aceite para el alumbrado y las vestiduras de los sacerdotes, siendo este último el que vamos a usar como el enfoque principal de este estudio.
Pero antes quería recordar lo mencionado en el estudio anterior, donde dije que el Tabernáculo (siendo un Templo para Yahweh) es una representación de cada hombre y cada mujer que conforman el pueblo redimido,
así como nos dicen las Escrituras…
Corintim Bet (2 Corintios) 6:16
16 … Porque ustedes son el templo del Elohim viviente, como Elohim dijo: Habitaré y andaré entre ellos, Y seré su Elohim, Y ellos serán Mi pueblo.
Y quería aprovechar también para comentar la relación que tiene el altar para el incienso y el aceite para el alumbrado en nuestras vidas.
En el caso del altar del incienso, podemos entender que representa nuestras oraciones, ya que las propias Escrituras nos señalan esta conexión en el libro de Apocalipsis
Hitgalut (Apocalipsis) 5:8
8 Y cuando hubo tomado el libro, los cuatro seres vivientes y los veinticuatro ancianos se postraron delante del Cordero; todos tenían arpas, y copas de oro llenas de incienso, que son las oraciones de los santos;Hitgalut (Apocalipsis) 8:3-4
3 Otro ángel vino entonces y se paró ante el altar, con un incensario de oro; y se le dio mucho incienso para añadirlo a las oraciones de todos los santos, sobre el altar de oro que estaba delante del trono.
4 Y de la mano del ángel subió a la presencia de Elohim el humo del incienso con las oraciones de los santos.
Y con relación al aceite para el alumbrado, podemos notar que simboliza al Espíritu de Elohim (que nos ilumina),
es decir, nos da revelación y sabiduría de Su bendita voluntad.
Además de que el aceite tiene un significado de unción, que significa, que hace que alguien tenga el permiso (o autorización) de Yahweh para realizar una labor en especial.
Y un ejemplo de esto lo tenemos en 1ª de Samuel 9
Shemuel Alef (1 Samuel) 9:16
16 Mañana a esta misma hora Yo [Yahweh] enviaré a ti un varón de la tierra de Benjamín, al cual ungirás por príncipe sobre Mi pueblo Israel, y salvará a Mi pueblo de mano de los filisteos; porque Yo he mirado a Mi pueblo, por cuanto su clamor ha llegado hasta Mí.
Para algunos puede parecer que la unción con aceite [mencionada en el Tanaj (o antiguo testamento)] era solo un ritual, pero a la verdad simbolizaba que el espíritu Apartado estaría obrando a través de la persona ungida.
Y hay algo bien importante a tener en cuenta, y es que el aceite usado por orden de Yahweh en la mayoría de los casos, era el aceite de oliva; y este aceite es un elemento con muchas buenas propiedades, valorado por muchos como algo casi milagroso.
En nuestros días sabemos que el aceite de oliva es de gran valor, pero sin embargo el uso que le damos es muchísimo menor que en la antigüedad.
El aceite no solo servía como combustible para iluminar en la antigüedad, además de ser usado para ungir a las personas para una labor específica; sino que también era básico para la alimentación (siendo que tiene muchas propiedades beneficiosas para la nutrición) y además como medicina, usado para sanar heridas y algunas enfermedades.
Bueno… Habiendo ya comentado sobre el Tabernáculo, el altar del incienso y el aceite para el alumbrado, vamos a ver la importancia que le dio Yahweh a las vestiduras de los sacerdotes.
Miremos lo que nos dice Shemot 28
Shemot (Éxodo) 28:1-3
1 Harás llegar delante de ti a Aarón tu hermano, y a sus hijos consigo, de entre los hijos de Israel, para que sean Mis sacerdotes; a Aarón y a Nadab, Abiú, Eleazar e Itamar hijos de Aarón.
2 Y harás vestiduras sagradas a Aarón tu hermano, para honra y hermosura.
3 Y tú hablarás a todos los sabios de corazón, a quienes Yo he llenado de espíritu de sabiduría, para que hagan las vestiduras de Aarón, para consagrarle para que sea Mi sacerdote.
Como podemos notar en este pasaje, Yahweh le dio bastante relevancia a las vestiduras que deberían usar los sacerdotes, y puede que a muchos no les parezca relevante esta información, porque el mandato de hacer vestiduras específicas era únicamente para el sacerdocio y no para todo el pueblo.
Y si bien esto es cierto, debemos tener en cuenta lo que nos dice Shemot 19:6
Shemot (Éxodo) 19:6
6 Y vosotros Me seréis un reino de sacerdotes, y gente apartada. Estas son las palabras que dirás a los hijos de Israel.
Aun con esto, algunos pueden pensar que esto, solo era válido para el pueblo Israel en el antiguo pacto, por eso vamos a ver como en el brit Hadashá (o nuevo testamento) también tenemos referencia de esto.
Hitgalut (Apocalipsis) 1:4-6
4 … Gracia y paz a vosotros, del que es y que era y que ha de venir, y de los siete espíritus que están delante de Su trono;
5 y de Yeshúa el testigo fiel, el primogénito de los muertos, y el soberano de los reyes de la tierra. Al que nos amó, y nos lavó de nuestros pecados con Su sangre,
6 y nos hizo reyes y sacerdotes para Elohim, Su Padre; a Él sea gloria e imperio por los siglos de los siglos. Amén.
Con esto no estoy diciendo que debamos usar las mismas vestiduras que fueron ordenadas para el sacerdocio levítico, ya que no hay mandamientos específicos para aquellos que no pertenecían a la tribu de Levi, ni para nosotros en el Sacerdocio según el orden de Melquisedec.
Por lo que muchos también pueden pensar que, por esta misma razón, en el orden de Melquisedec, simplemente las vestiduras no son relevantes, porque lo importante es lo que hay en nuestro corazón.
Y piensan esto basándose en pasajes como el siguiente:
Kefa Alef (1 Pedro) 3:3-4
3 Vuestro atavío no sea el externo de peinados ostentosos, de adornos de oro o de vestidos lujosos,
4 sino el interno, el del corazón, en el incorruptible ornato de un espíritu afable y apacible, que es de grande estima delante de Elohim.
Y si bien este mensaje es importante, es un error pensar que las ropas que usamos no son relevantes, usando como excusa otros pasajes como Yojanán 7:24
Yojanán (Juan) 7:24
24 No juzguen según las apariencias, sino juzguen con justo juicio.
Pero en este sentido debemos entender la diferencia entre Aparentar o Representar.
Y es que así como nos dice el verso anterior, no debemos juzgar por las apariencias, lo que no significa que no debamos juzgar las formas como los demás se comportan (incluyendo con esto la manera como se identifican, y lo que representan).
Y es que somos llamados a ser santos, lo que significa ser apartados, y es que aunque seguimos en el mundo, no debemos comportarnos como el mundo, ni identificarnos con él.
Yaacob (Santiago) 4
4 … Cualquiera, pues, que quiera ser amigo del mundo, se constituye enemigo de Elohim.
Lo que quiero decir con esto, es que aun cuando no tenemos mandamiento específico de lo que debemos vestir, debemos tener en cuenta que las ropas que usamos forman parte de cómo nos identificamos.
Y en este sentido, creo que es importante mencionar, que no me estoy refiriendo, a que nos identifiquemos por lo costosa o barata que pueda ser nuestra vestimenta, sino en las formas en como las usamos.
Y es que en el mundo existen muchas culturas y religiones que pueden ser identificadas por sus ropas o atuendos, y en este sentido quiero aprovechar para recomendarte algunos de los estudios que puedes encontrar en nuestra página web relacionados con las vestiduras.
Estos estudios son:
¿Qué Vestuario Usaría Yeshúa?
¿Por Qué Israel Nazareno parece Judaísmo? Parte 1
y
¿Por Qué Israel Nazareno parece Judaísmo? Parte 2
También me parece relevante para este estudio el verso que se encuentra en Devarim 22:5, donde nos da otro ejemplo de la importancia de como nuestras vestiduras son importantes para identificarnos.
Miremos:
Devarim (Deuteronomio) 22:5
5 No vestirá la mujer traje de hombre, ni el hombre vestirá ropa de mujer; porque abominación es a Yahweh tu Elohim cualquiera que esto hace.
A causa de este verso, muchos han pensado y enseñado erróneamente algo tan infundado como que las mujeres no deben usar pantalones porque es una prenda de hombres.
Pero cuando escudriñamos las Escrituras, no encontramos ni una sola referencia a los pantalones.
Mas bien encontramos referencias a túnicas y mantos, que tienen mucho más parecido a un vestido que a un pantalón
Y en último caso lo más parecido a un pantalón sería lo mencionado en el verso 42 de Shemot 28 que nos dice lo siguiente:
Shemot (Éxodo) 28:42
42 Y les harás calzoncillos de lino para cubrir su desnudez; serán desde los lomos hasta los muslos.
En este caso, el calzoncillo tiene como principal función ser una prenda interior, que eventualmente pudiera quedar expuesta pero normalmente no sería vista por los demás.
Y entre otras prendas que no son mencionadas en las Escrituras y que además no tienen ninguna utilidad se encuentra el uso de la corbata, que en muchos lugares parece que es una prenda que indica estatus o elegancia, pero que muchos sospechan que su origen no sea nada honorable.
La cuestión principal es que las vestiduras tienen dos funciones principales, que son la utilidad para cubrir y proteger nuestros cuerpos, para situaciones como el frio y el calor y en especial para cubrir las partes del cuerpo que necesitan ser más y mejor protegidas, y la otra función es la de representarnos como en el ejemplo de las vestiduras de hombres y mujeres y la diferencia entre los sacerdotes y el sumo sacerdote.
Y meditando en el mandamiento de que la mujer no debe vestir como hombre y el hombre no debe vestir como mujer, podemos ver que esto tiene mucho sentido cuando pensamos en que nuestras ropas nos identifican.
Y esto se nos hace muchos más fácil de entender cuando pensamos en los uniformes que usan algunas personas para representar una profesión como lo puede ser un policía, o un militar.
Y es que Las Escrituras nos muestran en varios lugares como se relacionan las ropas con nuestras obras y nuestro propósito.
Por ejemplo, Sofonías 1:8 nos dice
Sofonías 1:8
8 Y en el día del sacrificio de Yahweh castigaré a los príncipes, y a los hijos del rey, y a todos los que visten vestido extranjero.
Y tenemos otro ejemplo de como las vestiduras son importantes en Matityahu 22.
En este capítulo, Yeshúa menciona una parábola, diciendo que el Reino de los Cielos es semejante a un Rey que hizo una fiesta de bodas para su hijo, Y que envió a sus siervos para llamar a los invitados, pero los invitados no quisieron asistir.
Entonces el rey enojado hizo llamar a cualquier persona del reino que quisiera asistir.
Matityahu (Mateo) 22:10-13
10 Y saliendo los siervos por los caminos, juntaron a todos los que hallaron, juntamente malos y buenos; y las bodas fueron llenas de convidados.
11 Y entró el rey para ver a los convidados, y vio allí a un hombre que no estaba vestido de boda.
12 Y le dijo: Amigo, ¿cómo entraste aquí, sin estar vestido de boda? Pero él enmudeció.
13 Entonces el rey dijo a los que servían: Atadle de pies y manos, y echadle en las tinieblas de afuera; allí será el lloro y el crujir de dientes.
Esto nos muestra como mencioné antes la relación de nuestras vestiduras y nuestras acciones.
Porque Yahweh no hace acepción de personas, y sabemos que Yahweh recibe tanto a ricos como a pobres si tienen un verdadero arrepentimiento.
El punto, es lo que intento explicar con este estudio, y es la importancia de que los demás puedan ver en nosotros lo que representamos.
Y la necesidad (en cierta medida) de tener un “estilo” de vestir, y en cierto sentido “casi” como un uniforme.
Y entendemos (como he dicho antes) que no hay un mandamiento específico para nuestros días, pero también entendemos que por la guía del Espíritu de Elohim podemos llegar al entendimiento de como debemos vestirnos.
Con pudor y que exalte a Yahweh.
Colosim (Colosenses) 3:12
12 Vestíos, pues, como escogidos de Elohim, apartados y amados, de entrañable misericordia, de benignidad, de humildad, de mansedumbre, de paciencia;
Antes mencione que debemos valorar la ropa “casi como un uniforme” entendiendo que nos representa de alguna manera, pero no se trata de que todos debamos tener una misma ropa, sino de entender la importancia de marcar una diferencia con el resto de las naciones donde tanto nuestro interior como nuestro exterior estén alineados con nuestra fe, y sobre todo teniendo en cuenta que tenemos un propósito divino bien definido porque somos el pueblo de Yahweh, el cuerpo de Yeshúa y al mismo tiempo Su novia, donde debemos trabajar por y para Él.
Shabat Shalom
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Recuerda La mies es mucha y los obreros pocos, apóyanos.
Parashá Infatil aquí