“Esta estudio de los Diezmos es una adaptación del estudio “Why Three Tithes For Today?” del estudio “Discipleship the Kingdom and You“”.

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En este nuevo estudio, vamos a hablar sobre asuntos de Discipulado, el Reino y Tú. Definimos a un discípulo como alguien que trata de conformarse verdaderamente al caminar de Yeshúa y hacer todo lo que la Torá dice que hay que hacer. Y algunos de nuestros discípulos han hecho una serie de preguntas sobre cosas que están realizando en su caminar. Una de las preguntas que han surgido es sobre el sistema de tres diezmos. Sabemos que hay tres diezmos ordenados en la Torá, pero ¿se aplican todavía a nosotros hoy? La respuesta es sí. Y para saber por qué, quédate con nosotros en este estudio.

Es maravilloso ver a la gente crecer en su desarrollo espiritual. Cuando somos recién nacidos, otro nos alimenta, otro nos limpia y otro nos cambia. Si la habitación está demasiado fría, se aseguran de que estemos calientes, y si está demasiado caliente, intentan refrescarnos. Pero a medida que envejecemos, empezamos a ocuparnos de nuestras propias responsabilidades. Aprendemos a alimentarnos, a limpiarnos y a recoger lo que ensuciamos en nuestras habitaciones. Con el tiempo, al llegar a cierta edad, deberíamos poder empezar a ayudar en otras cosas de la casa. Lo mismo ocurre cuando llegamos a la edad adulta. Ahora es nuestro trabajo cuidar de otros que no son capaces de cuidarse a sí mismos, como a los ancianos y a los niños.

El mismo tipo de crecimiento tiene lugar en el ámbito espiritual. En primer lugar, como recién nacidos en la Escritura, otra persona nos alimenta, nos limpia y nos cuida. Pero a medida que aprendemos y crecemos espiritualmente, tenemos que llegar al lugar donde estamos aprendiendo a cuidar de los demás. Pero cuando empiezas a ocuparte de los demás, los mandamientos adquieren una importancia y una forma totalmente nuevas. Y luego terminas con preguntas de discipulado sobre cómo ciertos mandamientos se aplican a las personas individualmente. Por ejemplo: “¿Estoy realmente obligado a dar un tercer diezmo para atender a los pobres?” Esa es una pregunta muy madura. “¿Cuáles son mis responsabilidades? ¿Qué debo hacer? ¿Cómo puedo complacer a mi Elohim?” Si esto te suena conocido y tienes estas preguntas, este estudio es para ti.

Uno de los requisitos que tenemos en Israel Nazareno para todos los discípulos es que lean todos los estudios doctrinales al menos dos veces. Y si surge alguna pregunta, los animamos a hacerlas. Porque el propósito es que todos estemos en la misma página o afines en la doctrina. Ante todo, queremos saber lo que dice Su palabra para poder estar en la misma página con Él y caminar juntos con Él. Y luego, tenemos que estar en la misma página entre nosotros, al menos en términos doctrinales. La manera de hacerlo es estando de acuerdo con lo que creemos que dice la palabra de Elohim. Y si no, podemos hablar acerca de ello hasta que sepamos lo que dice la palabra de Elohim.

El problema es que hay ciertos aspectos de nuestro caminar que tienen que ver con los deberes y las responsabilidades. Se puede entusiasmar a la gente con mucha facilidad cuando oyen hablar de los beneficios del reino, de las promesas a los discípulos y de todas las cosas buenas. Se puede conseguir que la gente descanse y lea en Shabat, porque no es algo realmente difícil. Simplemente descansan, se refrescan y se alimentan. Es muy fácil conseguir que los creyentes lo hagan. Y ahí es donde tienes tus 4.000, tus multitudes y muchedumbres. Pero luego otras personas guardan silencio y se meten en la oscuridad, por así decirlo, cuando se empieza a hablar de los diezmos. Y otras personas simplemente van a armar un escándalo. Algunas personas prefieren ir a hacerse una cirugía oral mayor que escuchar lo que dice Yahweh sobre la financiación de la obra del reino de Su Hijo. Si eso te describe, entonces realmente, hermano o hermana, quizá quieras orar y pensar en ello.

Una de las cosas de las que vamos a hablar en esta primera parte es de las razones del reino de Yeshúa. Vamos a hablar de las cosas que sabemos que tenemos que hacer y de las razones por las que tenemos que hacerlas. Pero primero, hablemos de las quejas.

Muchas veces la gente viene con quejas. Es muy interesante sentarse y recibir las quejas, los correos de odio y los mensajes desagradables a lo largo de los años. Probablemente lo verás también en tu caminar como discípulo. Pero se puede empezar a desglosar las quejas en varias categorías. A veces oímos quejas del lado de la iglesia (de los católicos o del sistema eclesiástico). Y su argumento básico es que toda la Torá está eliminada excepto el diezmo, por supuesto. Luego tienes la otra cara de la moneda en el movimiento mesiánico o efraimita, que argumenta que nada de la Torá se ha eliminado excepto el diezmo.

El problema con esto es bastante obvio. O bien vamos a orar y someternos a Yahweh y pedirle que nos conduzca y guíe en todo por Su Espíritu, en cuyo caso adoptamos toda Su Torá. O no lo hacemos, en cuyo caso no importa si rechazamos el 1% o el 99%. De cualquier manera, seguimos rechazando Su Torá. Sigue siendo el error de los fariseos. Los fariseos creen que pueden empezar con Su Torá original y luego modificarla y hacer sus propias reglas. Creen que pueden eliminar este mandamiento y añadir aquél otro. Porque añaden sus propias leyes de cerco y este tipo de cosas. Y creo que muchos de los mesiánicos y efraimitas cometen el mismo tipo de errores. Porque efectivamente están tratando de hacer las cosas a su manera en lugar de someterse verdaderamente a Yahweh y pedirle a Él: “Querido Maestro y Rey, por favor, trátame como Tu siervo. ¿Qué quieres que haga?” Esa es la forma en que debemos abordar el diezmo, así como cualquier otro tema.

Otro patrón que se ve es que el 99 por ciento, o sea la mayoría de las personas en el movimiento de Raíces Hebreas, todavía están en lo que se podría llamar el Modelo Mesiánico, y mucho de ellos están en lo que se conoce como el Modelo de la Doctrina de la Prosperidad. Y así, básicamente, tratan el diezmo como si les perteneciera y entonces dirán todo tipo de cosas. Pueden creer que están sirviendo verdaderamente a Yeshúa, pero no están ayudando a construir un reino ministerial unificado y global para Yeshúa. Lo han olvidado todo, por lo que, no enseñan sobre la disciplina de la congregación, no enseñan sobre la estructura y el orden adecuados, no enseñan sobre el fundamento apostólico. Más bien, enseñan cosas que hacen que el camino sea más fácil, y de esta manera, intentan entusiasmar a la gente para que dé. Luego se llevan el dinero a casa y eso es corrupción. Y por eso entendemos que hay mucha gente que se opone a dar. Nadie quiere dar a la corrupción, eso no tiene ningún sentido.

Pero contrastémoslo con lo que hacemos aquí en Israel Nazareno. En Israel Nazareno, todos los diezmos, donaciones, regalos y ofrendas se administran cuidadosamente. Porque sabemos que al final de nuestra vida vamos a ir a presentarnos ante el trono de Yahweh. Y vamos a responder por todo lo que hicimos y todo lo que dejamos de hacer. Y cuando piensas en la responsabilidad de eso y en lo increíble que va a ser ese día, eso es mucha responsabilidad.

Así que, esa es la cuestión. ¿Tenemos el corazón puesto en las cosas terrenales? ¿Seguimos siendo carnales? ¿Seguimos centrándonos en el dinero? ¿O es el dinero algo que Yahweh nos da para ayudarnos a tener el tiempo que necesitamos para hacer Su obra ministerial, para promover y construir Su reino? ¿Cuál es nuestra relación con el dinero? ¿Es algo que Yahweh nos proporciona para que podamos hacer más por Él, o es algo que deseamos y codiciamos? Estas son preguntas importantes para cualquier discípulo. Y si ves a personas que se niegan a diezmar entonces las mismas preguntas se aplican a ellos.

Pero, de nuevo, entendemos la reticencia de mucha gente. Y conocerás a mucha gente así. Para muchos, es una excusa y para muchos, es una experiencia legítima. La mayoría de nosotros nos hemos quemado en algún momento en la iglesia o en el sistema ortodoxo. La cuestión es que las personas son solo personas, y no podemos dejar que eso nos afecte porque ya sabemos, como nos dice en Filipenses, que habría ministros infieles.

Filipim (Filipenses) 3:18-19
18 Porque hay muchos que andan, de los cuales os he hablado muchas veces, y ahora os digo hasta con llanto, que son enemigos de la cruz del Mesías
19 cuyo fin es la destrucción, cuyo Elohim es su vientre, y cuya gloria está en su vergüenza; que ponen su mente en las cosas terrenales.

Aquí, el apóstol Shaul nos está diciendo que había muchos ministros, incluso en el primer siglo, que han puesto sus mentes en las cosas terrenales. No están manteniendo su mente en el requisito de construir con Yeshúa un reino unificado y global. Más bien, intentan ver lo que pueden conseguir para sí mismos. Y así, entendemos que la gente quiera ser precavida. Pero también tenemos que saber qué es lo que estamos llamados a hacer, y luego tenemos que hacerlo si vamos a ser discípulos.

Como discípulos, ya habrán leído el estudio El gobierno de la Torá al menos dos veces. No tenemos tiempo para hacer un estudio completo al respecto. En algún momento tendremos que hacer un estudio completo sobre el diezmo, esperamos trabajar eso en algunas otras cosas en el futuro. Pero si quieres comprobarlo, El Gobierno de la Torá habla del sistema de los tres diezmos que se daba bajo el orden levítico y de cómo se sigue aplicando hoy en día en el orden melquisedeciano.

Tenemos el primer diezmo que va al sacerdocio. Eso es básicamente lo que financia el trabajo del reino de Yeshúa lo que va a permitir que Su reino crezca. No hacemos todo esto para ganar dinero, pero está claro que necesitamos dinero. No nos dan el alquiler gratis y no tenemos las cámaras y los programas gratis sólo porque estamos haciendo el trabajo de Yeshúa. La obra del reino de Yahweh es una obra de financiación colectiva (o de multitudes) y nosotros somos la multitud. Por lo tanto, es definitivamente un sistema de “pagar para usar”. Si queremos ayudar a construir el reino de Yeshúa, que es un esfuerzo global que requiere absolutamente de todos, entonces cada uno debe hacer su parte. La mayoría de la gente no tiene demasiado problema con eso o al menos entienden el concepto. Pero el verdadero discípulo intenta asumir ese papel y decir: “Bien, si esto es lo que debo hacer, entonces hagámoslo”.

Luego está el segundo diezmo, que podríamos considerar como el diezmo del pueblo o el diezmo familiar. El propósito del segundo diezmo es llevar a tu familia a las fiestas tres veces al año y hacer que las fiestas sean un deleite para ti y tu familia. Además, para educar a tus hijos en el camino que deben seguir para que, cuando sean mayores, no se aparten de él. Así que el segundo diezmo es para hacer de las fiestas un deleite y entonces nuestros hijos y nuestras familias esperan con ansias las fiestas de Yahweh tres veces al año.

Luego, en el próximo capítulo, vamos a explicar sobre el tercer diezmo que es para los pobres, la viuda y el huérfano. Básicamente, es el programa de pensiones (o seguridad social) de Yahweh. El tercer diezmo es muy importante, y vamos a ver que todavía se aplica en el Pacto Renovado, bajo el orden melquisedeciano. La aplicación es un poco diferente, pero en su mayor parte sigue siendo la misma.

Así que, eso será en el próximo capítulo. En este momento sólo queremos hablar del propósito del diezmo y de por qué sigue siendo importante. ¿Por qué se supone que aún debemos dar tres diezmos?

Creo que gran parte de la reticencia de la gente a diezmar es simplemente porque no saben para qué sirven los tres diezmos. Vemos a todos estos predicadores del evangelio de la prosperidad hablando de catedrales de cristal. Y vemos todo tipo de “Si no recaudo tantos millones de dólares…” No vemos sumisión. ¿Dónde está la sumisión al Espíritu de Elohim?

No podemos hacer nada con el resto del mundo. Pero lo que sí podemos hacer es someternos personalmente a Yahweh. Y podemos decir: “Bien, Padre, queremos ser Tus servidores, ¿qué quieres que hagamos?”

Yahweh no siempre responde directamente, pero una de las cosas que sabemos en general es que está buscando una novia de Proverbios 31 para Su Hijo y tiene la elección de todos los que están ahí fuera. Tenemos que darle razones para que nos elija como esposa de Su Hijo. Él está buscando una novia de Proverbios 31 para Su Hijo que quiera ayudarle a construir Su reino. Una novia que esté utilizando su mina lo mejor que puede. Que ama a su Esposo, que quiere verlo triunfar y que está ansiosa por hacer todo lo que pueda para ayudar a construir el reino de su Esposo.

Y cuando oyes las quejas de la gente, no puedes evitar pensar que no entienden lo que intentamos hacer. Ellos no entienden que estamos tratando de construir un ministerio global para Yeshúa que eventualmente será el gobierno espiritual gobernante y reinante del mundo después de que el sistema babilónico caiga en la séptima trompeta. Vamos a hablar de ello más adelante. Pero cuando escuchas las quejas entiendes que la gente ha sido abusada por los pastores y rabinos, y se les ha mentido. Pero aún queda trabajo por hacer. Todavía hay un reino global que construir para Yeshúa y se necesita a cada uno de nosotros. Solían tener el concepto de que la cristiandad se expandía por todo el mundo. Pues bien, esa sigue siendo la misión bíblica y eso es algo que todavía estamos llamados a hacer. Aunque el resto del cuerpo de creyentes se desvíe del camino, seguimos estando llamados a hacer lo correcto.

¿Qué estamos llamados a hacer? Yeshúa nos da la Gran Comisión en el capítulo 28 de Mateo.

Matityahu (Mateo) 28:18-20
18 Y Yeshúa se acercó y les habló diciendo: “Toda autoridad Me ha sido dada en el cielo y en la tierra.
19 Id, pues, y haced discípulos a todas las naciones, sumergiéndolas en Mi nombre*,
20 enseñándoles a observar [guardar, custodiar, practicar, shomer] todas las cosas que os he mandado; y he aquí que Yo estoy con vosotros todos los días, hasta el fin del mundo”. Amén.

[Para saber por qué nos sumergimos sólo en el nombre de Yeshúa, por favor vea “La Inmersión sólo en el nombre de Yeshúa”, en Estudios Escriturales Nazarenos, Volumen Tres].

Bueno, tenemos la Gran Comisión en Mateo 28, verso 18 donde Yeshúa dice: “Toda la autoridad Me ha sido dada”. Ahora, sabemos que Satanás es el príncipe de este mundo. Pero habrá una transición que tendrá lugar después de la tribulación donde el gobierno de Yeshúa va a ser puesto a cargo.Y la Tribulación se acerca, por lo que, tendremos que estar preparados.

¿Qué dice Yeshúa que tenemos que hacer? ¿Cuáles son las órdenes de cómo actuar durante los últimos 2000 años? Él dice: “Yo tengo la autoridad, quiero que hagan discípulos en todas las naciones, sumergiéndolos en Mi Nombre. Y quiero que les enseñes a guardar todo lo que te he mandado”. En hebreo, “shomer” es guardar, vigilar, observar y hacer. ¿Y qué quiere Él?

Sabemos que Él quiere que le construyamos un reino global en Su ausencia. Ese es el sentido de la parábola de las minas. Y eso es lo que intentamos hacer. Pero es un reino de discípulos. No es un reino de los que sólo se llaman discípulos y luego no hacen lo que Él dice. De nuevo, por eso es tan maravilloso recibir preguntas sobre el tercer diezmo. Porque es una cuestión de “¿Estoy realmente obligado a velar por los pobres entre nosotros? ¿Soy el guardián de mi hermano?” En ese sentido, es maravilloso ver cómo se produce ese despertar.

¿Cuáles son las otras cosas que se nos ordena hacer? Se nos ha ordenado construir un ministerio unificado para Yeshúa en todo el mundo que eventualmente se convertirá en el gobierno global espiritual. Esto es lo que dice Efesios 2.

Efesim (Efesios) 2:19-21
19 Ahora bien, pues, ya no sed extraños ni extranjeros, sino conciudadanos con los santos y miembros de la casa de Elohim,
20 habiendo sido edificado sobre el fundamento de los apóstoles y profetas, siendo Yeshua Mesías mismo la piedra angular,
21 en el que todo el edificio, encajando entre sí, se convierte en un templo apartado en Yahweh…

Ya no somos extranjeros ni forasteros en la mancomunidad de Israel. Ahora somos conciudadanos de los santos y de la comunidad de Israel, aquí llamados miembros de la casa de Elohim. Es una cosa de familia porque se construye sobre un solo fundamento de apóstoles y profetas, siendo Yeshúa Mesías mismo la Piedra Angular Principal en la que todo el edificio, al ser encajado, crece en un solo templo unificado y apartado en Yahweh.

Es simplemente increíble. Hablas con otras personas y no saben lo que Yeshúa estaba tratando de hacer. No tienen el concepto de construir un reino global unificado que eventualmente servirá como el gobierno espiritual del mundo por mil años. Ellos no entienden esto, sin embargo, está ahí mismo en la Escritura.

Yeshayahu (Isaías) 9:7
7 Del aumento de Su gobierno y shalom no habrá fin. Sobre el trono de David y sobre Su reino, para ordenarlo y establecerlo con juicio y justicia desde ese momento en adelante, incluso para siempre. El celo de Yahweh de los ejércitos lo realizará.

Y nosotros lo creemos. ¿Entendemos que es nuestro trabajo hacer que eso ocurra? Porque somos Su cuerpo. Somos Sus manos y Sus pies. Estamos haciendo lo que el Espíritu de Yeshúa está haciendo. Si somos realmente Sus discípulos y somos verdaderamente guiados por Su Espíritu, ya estamos manifestando el fruto del Espíritu de Yeshúa. Y el celo de Yahweh de los Ejércitos va a ser el que realice esto. Así que, de nuevo, esto no es algo que tengamos que hacer. Todo lo que tenemos que hacer es escuchar lo que el Espíritu de Yeshúa nos dice y hacerlo. Porque el Espíritu de Yeshúa ya está construyendo Su reino en todo el mundo, sólo tenemos que someternos y hacer todo lo que Su palabra dice que hagamos si queremos ser Sus discípulos. (Y a Él no se le puede engañar).

Bueno, la gente dice: “¿Estás seguro de que vamos a un gobierno espiritual global? ¿Y sabes cómo? ¿Estás seguro?”

Hablamos de eso en El Gobierno de la Torá, así como en Apocalipsis y el Fin de los Tiempos. Allí vemos cómo el gobierno de Babilonia va a caer al final de la tribulación. Entre la tribulación y las copas en Armagedón, el sistema babilónico caerá y no será más, tal como la profecía en Daniel.

Daniel 7:26-27
26 “Pero el tribunal se sentará, y le quitarán su dominio [los cuernos pequeños; es decir, el del papa], para consumirlo y destruirlo para siempre.
27 Entonces el reino y el dominio, y la grandeza de los reinos bajo todo el cielo, serán dados al pueblo, a los santos del Altísimo.
Su reino es un reino eterno, y todos los dominios Le servirán y obedecerán”.

Aquí es donde entra el discipulado. Dice, después de que el dominio del cuerno pequeño (del papa) sea quitado, el reino, el dominio y la grandeza de los reinos bajo todo el cielo serán dados al pueblo, a los santos del Altísimo. Si esos no son los discípulos, no sé quiénes son.

Hermanos y hermanas, ¿estamos preparados para esto? ¿Estamos preparados para recibir el reino y el dominio? En el estudio de Apocalipsis no se fijan fechas, pero si estudiamos la línea de tiempo y el progreso y la secuencia de los acontecimientos, hermanos y hermanas, estamos llegando justo a la tribulación. Y al final de la tribulación, sonará la séptima trompeta, que es cuando Babilonia caerá. Será necesario establecer un nuevo sistema de gobierno a la caída de Babilonia. Esos seremos nosotros y no, no estamos preparados. Por lo tanto, esa es la razón del entrenamiento del discipulado. Leamos de nuevo el versículo 27.

Daniel 7:27
27 Entonces el reino y el dominio, y la grandeza de los reinos bajo todo el cielo, serán dados al pueblo, a los santos del Altísimo.
Su reino es un reino eterno, y todos los dominios Le servirán y obedecerán”.

Interpretamos a los santos del Altísimo como los discípulos de Israel Nazareno. Hay una especie de acertijo ahí porque continúa diciendo que Su reino es un reino eterno, y que todos los dominios Le servirán y obedecerán. Así que, por un lado, está diciendo que el reino y el dominio son dados a los discípulos (discípulos de Israel Nazareno), y al mismo tiempo Su reino es un reino eterno, y todos los dominios Le servirán y obedecerán. Esto lo entendemos porque somos Su cuerpo. Y Él va a darnos autoridad, poder y dominio a nosotros como Su cuerpo mientras Él continúa sirviendo como nuestra Cabeza. Entonces seremos Sus manos y Sus pies (efectivamente, una carne con nuestro Esposo) en ese momento, y seremos Su novia, una carne haciendo Su voluntad aquí en la tierra. ¿Estamos seguros? Sí, estamos seguros. Ya hemos hablado de esto muchas veces. Aquí hay más testigos.

Tehillim (Salmos) 2:7-9
7 “Declararé el decreto: Yahweh Me ha dicho: ‘Tú eres Mi hijo, hoy te he engendrado’.
8 Pídeme, y te daré las naciones como herencia, y los confines de la tierra como posesión.
9 Los romperás con una vara de hierro; Los harás pedazos como una vasija de alfarero”. [Yeshúa está recibiendo una vara de hierro de Su Padre].

Aquí, en Tehillim (Salmos) 2, versículos 7-9, Yeshúa está hablando. Vemos muy claramente que Yahweh está entregando a Su Hijo Yeshúa una vara de hierro con la que ahora puede hacer pedazos a las naciones mientras gobierna y reina sobre ellas, durante el Milenio. Pero, ¿comprendemos que ese es nuestro trabajo como Sus manos y Sus pies? Sigamos leyendo lo que dice Yeshúa en Apocalipsis 2, a partir del versículo 26.

Hitgalut (Apocalipsis) 2:26-27
26 “Y al que venza [Israel, los ‘vencedores de Elohim’] y guarde Mis obras hasta el final, a él le daré el poder sobre las naciones.
27 ‘Él los gobernará con una vara de hierro; serán despedazados como los vasos del alfarero’, como también he recibido de Mi Padre…”

Ahora, hemos dicho esto en estudios anteriores. Pero como recordatorio, “el que vence” es sólo otro nombre para Israel, los vencedores de Elohim. Cuando tienes problemas, oras, escuchas y se supone que superas el problema en Elohim. Yeshúa está diciendo que al que venza (Israel) y guarde Sus obras hasta el final, a él Yeshúa le dará poder sobre las naciones, para que las gobierne con vara de hierro. Y serán despedazados como los vasos del alfarero como Yeshúa también ha recibido de Su Padre. Es decir, tenemos que trabajar para Él. No sólo aprender, tenemos que trabajar para Él.

Vemos el mismo escenario de Yeshúa recibiendo una vara de hierro en Salmos 2 y luego entregándola a Su cuerpo (Su novia) en Apocalipsis. Porque Su novia es la que va a tener el trabajo de gobernar y reinar sobre las naciones, como también dice en Daniel 7.

Ahora, en Apocalipsis y el Fin de los Tiempos, también hablamos de la profecía de Daniel, donde la piedra que se corta de la montaña sin manos golpea la imagen en los pies, y toda la imagen babilónica cae en pedazos y es llevada por el viento como paja. Y en ese día, se requerirá un sistema diferente para reemplazar el sistema babilónico. ¿Suena fantástico? Nosotros somos los llamados a establecer ese sistema. Y Él nos está dando un tiempo de espera, Él nos está poniendo en marcha ahora. Quiere ver cuáles de nosotros van a responder.

En El Gobierno de la Torá, explicamos cómo Elohim quiere que construyamos ese gobierno espiritual global para Su Hijo y cómo quiere que lo financiemos, que es a través de los tres diezmos (más los regalos y las ofrendas).

Así que, ahora que tenemos un entendimiento de que Yahweh ha estado tratando de establecer un reino global para Su Hijo por un tiempo muy largo, ahora podemos empezar a entender lo que realmente se dice en el capítulo 15 de Hechos, en el llamado concilio de Jerusalén. Vemos que lo que realmente se está discutiendo es el gobierno global para que los gentiles puedan ser traídos de vuelta a la comunidad de Israel.

Maasei (Hechos) 15:15-17
15 Y con esto las palabras de los profetas están de acuerdo, tal como está escrito:
16 “Después de esto, volveré y reconstruiré el Tabernáculo de David, que ha caído; reconstruiré sus ruinas y lo levantaré;
17 Para que el resto de la humanidad busque a Yahweh, incluso todos los gentiles que son llamados por Mi Nombre, dice Yahweh que hace todas estas cosas”.

En este punto, en el capítulo 15 de Maasei (Hechos), habla el apóstol Yaakov (Santiago), que era el líder de la asamblea nazarena después de la muerte de Yeshúa. Y efectivamente está hablando aquí de cómo Yeshúa va a traer a los efraimitas de vuelta al redil. Por eso se habla de esto en el capítulo 15 de Maasei. Porque la fe en Yeshúa es en realidad un gobierno espiritual y durante mil años será el gobierno espiritual global. Pero es nuestro trabajo de aquí a entonces ponerlo en marcha, y tenemos que ocuparnos de ello.

Por lo tanto, esa es la razón de los tres diezmos. En el próximo capítulo, vamos a describir brevemente el primer y el segundo diezmo. Y luego vamos a hablar del tercer diezmo, por qué sigue siendo importante, cómo se manifestaba en el orden levítico, y cómo todavía lo vemos manifestarse en el orden melquisedeciano. Y esperamos que eso sea del agrado, si no de la mayoría de los creyentes, al menos sí de los discípulos que realmente quieren saber lo que dice la palabra de Yahweh para poder hacerlo. Porque eso es lo que es un discípulo.

En el siguiente capítulo hablaremos de cómo podemos complacer a Yahweh ayudando a financiar el reino espiritual global de Su Hijo. Especialmente para las necesidades de los pobres, las viudas y los huérfanos.