Mi Nombre es Moisés Pérez, Nací en Chile el año 1983, en la ciudad de Linares. Actualmente casado con Herta Vidal con quién tenemos 2 hermosos hijos (Javiera y Ariel)
Allí crecí en una familia cristiana evangélica, donde mi mamá era la principal fuente de acercarnos a Elohim y quién siempre insistió en que toda la familia fuéramos a la iglesia y no nos apartemos de Elohim, y esto desde que tengo memoria desde niño. Allí en la iglesia crecí aprendiendo de Elohim (Dios) y de Yeshúa (Jesús). En la iglesia, allí en Linares, siempre intenté hace lo mejor posible por aprender y agradar a Elohim en la iglesia y participar en todo lo posible allí, como un niño y luego adolescente normal.
Luego al entrar a estudiar en la universidad en otra ciudad seguí en la iglesia evangélica donde comenzaron las decepciones de la fe cristiana evangélica al comenzar haciéndome preguntas, mientras participaba en la música y más que eso. En un principio tuvimos un pastor que cometió adulterio, y me estafó con mucho dinero (siendo yo un estudiante), lo cual siguió decepcionándome de la incongruencia de la fe cristiana evangélica. Lo que me llevó a alejarme un tiempo de esa iglesia cristiana. Pero por el temor a Elohim, y tomando en cuenta el texto de que no debemos dejar de congregarnos, un tiempo después volví a la misma iglesia el año 2007, donde conocí a Herta Vidal, la que se convertiría en mi esposa.
Allí en el regreso a la iglesia había un muy buen pastor, donde nos sentíamos muy cómodos con la iglesia y la doctrina, trabajando en la iglesia en el grupo de música y luego también como profesores en la escuela dominical. Pero cuando ese pastor jubiló, llegó otro pastor, periodo en el cual Elohim (que en este tiempo yo llamaba Dios o Señor) comenzó a hacerme pasar hambre espiritual, y comencé, junto a mi esposa, a estudiar la palabra de Elohim con una premisa en mente, que era “a lo mejor yo podría estar equivocado”. Esto me hizo comenzar a escudriñar las Escrituras, así como estaban escritas, y esto me hizo darme cuenta de que la ley de Elohim (Torá) nunca fue clavada en la cruz, en el significado que la iglesia enseña, sino que fue el acta de decretos que estaba en mi contra, o sea, mis pecados, y no la ley. Así mismo a ver que Yeshúa mismo dijo “que el no vino a anular la ley sino a cumplirla” y que cumplir en sus palabras no significa anular, como lo enseñaban en la iglesia cristiana, así que seguí estudiando y escudriñando las escrituras. Y de la misma manera aprendí el nombre de Elohim, Yahweh, y el verdadero nombre de Jesús, que es Yeshúa, y que a Él no le gusta que usemos Señor como si fuera su nombre propio. En ese tiempo, estábamos esperando a nuestra hija (Javiera) cuando Yahweh comenzó a mostrarme en visiones en sueños el camino a seguir. Y con esto en mente comenzamos a enseñar a los niños de nuestra clase en la escuela dominical, la verdadera narrativa de la biblia a los niños, de forma cronológica. Y cuando llegamos a los 10 mandamientos, el pastor y los diáconos de la iglesia (yo también era diácono en la iglesia en este momento) comenzaron a tener problemas con esto, ya que les estaba enseñando que debemos guardar los mandamientos de Yahweh (solo enseñé los 10 mandamientos y nada más) y solo por esto la iglesia nos comenzó a quitar de las actividades de la iglesia, y a tratar de controlarnos para que no hablemos.
Luego de un tiempo con mi esposa nos retiramos de la iglesia, y comenzamos a buscar con quién congregarnos. Allí comenzamos con unos hermanos a estudiar la biblia en las casas en Shabat, y eso me pareció bien al principio, pero buscábamos una congregación donde poder cumplir la Gran Comisión de nuestro Mesías. Y luego de encontrar algunas que no parecían bien al Espíritu, encontramos a Nazarene Israel.
Comenzamos a estudiar los libros de “La Fe Original” e “Israel Nazareno”, y nos dimos cuenta de que esta era la visión correcta, de trabajar en unidad, como uno con Yeshúa para cumplir la gran comisión en el camino de la unidad de las dos Casas de Israel (Efraim y Judá) en una sola nuevamente. Y en este punto, junto con mi esposa nos unimos a Israel Nazareno, momento desde cuando, gracias a Elohim, estamos haciendo, junto con mi esposa, todo lo que está en nuestras capacidades para la obra de Yahweh en Nazarene Israel para llevar a delante en Nombre de Yahweh hasta el regreso de nuestro Maestro y Pastor el Mesías Yeshúa.
Agradecemos cada día a Yahweh como familia a Yahweh por haber encontrado la fe correcta, en la cual podemos caminar cada día junto a Él en este pequeño rebaño.
Y si leíste hasta este punto, te animo a unirte a nosotros, en Nazarene Israel, la fe una vez entregada a los Santos, como un verdadero discípulo a apoyar el trabajo que nos dio nuestro Mesías Yeshúa en pos de la Unidad de las Dos Casas de Israel.
Yahweh te bendiga mucho.
