Introducción
Mishlé (Proverbios) 21:2
2 Todo camino del hombre es recto en su propia opinión; pero Yahweh pesa los corazones.
En este verso se concentra una enseñanza muy relevante, y es que por nuestra naturaleza caída (por causa del pecado de Adam) solemos pensar en la justicia desde una perspectiva muy subjetiva.
Donde lo más importante es lo que cada uno piense sobre lo que está bien y lo que está mal. Y en muchas ocasiones podemos estar actuando de la forma correcta, pero con las intenciones equivocadas, y otras muchas podemos estar haciendo algo que no está realmente bien, justificándonos en que “supuestamente” tenemos buenas intenciones.
Y esto me trae al pensamiento el escrito del apóstol Shaúl que dice:
Corintim Alef (1 Corintios) 10:23-24
23 Todo me es lícito, pero no todo conviene; todo me es lícito, pero no todo edifica.
24 Nadie busque su propio bien, sino el del otro.
Y es que el gran error de la humanidad para creer que nuestros caminos son rectos es pensar que tenemos algún derecho, sin entender que somos simples criaturas y que estamos sujetos a los designios de nuestro Creador, por lo que todo lo bueno que podamos tener y disfrutar tiene que ser basado en Su absoluta voluntad.
Y con esto en mente quiero que me acompañes a estudiar la parashá de esta semana enfocada en la justicia de Lot.
La Justicia de Lot
En esta oportunidad tenemos el gusto de presentarles el estudio de la parashá Vayerá, que es la porción de la Torá que encontramos en el libro de Bereshit del capítulo 18 al capítulo 22
En esta porción podemos encontrar pasajes muy importantes como lo son la promesa del embarazo de Sarai (mujer de Abraham), la intercesión de Abraham por Sodoma, la salida de Lot de Sodoma antes de la destrucción de Sodoma y de Gomorra, el encuentro de Abraham con Abimelec, el nacimiento de Isaac Y la prueba de Fe de Abraham donde Yahweh le pidió que sacrificara a Isaac, con lo cual podemos sacar muchas enseñanzas para edificación.
Sin embargo, como la intensión es profundizar sobre un tema en concreto, en esta oportunidad nos enfocaremos en la elección de Lot (el sobrino de Abraham), de vivir en Sodoma, un pueblo completamente pervertido, donde lo que predominaba era el egoísmo, siendo que los hombres lo único que querían era satisfacer sus deseos personales.
Y para entender el contexto, primero es importante ver lo que Yahweh le declaró a Abraham en Bereshit 18:20-21
Bereshit (Génesis) 18:20-21
20 Entonces Yahweh le dijo: Por cuanto el clamor contra Sodoma y Gomorra se aumenta más y más, y el pecado de ellos se ha agravado en extremo,
21 descenderé ahora, y veré si han consumado su obra según el clamor que ha venido hasta Mí; y si no, lo sabré.
Sabiendo Yahweh que el pueblo de Sodoma era perverso, había determinado destruirlo, pero no sin antes hacérselo saber a Abraham, probablemente para poner a prueba el carácter de Abraham con relación a la injustica de este pueblo. Y por otra parte nos muestra el deseo de Yahweh de hacer saber a Sus siervos los planes que tiene para la humanidad.
Bereshit (Génesis) 18:17
17 Y Yahweh dijo: ¿Encubriré Yo a Abraham lo que voy a hacer.
Y podemos ver, como del verso 23 en adelante, Abraham expresó su preocupación en que los inocentes no fueran castigados junto con los impíos.
Bereshit (Génesis) 18:23-24
23 Y se acercó Abraham y dijo: ¿Destruirás también al justo con el impío?
24 Quizá haya cincuenta justos dentro de la ciudad: ¿destruirás también y no perdonarás al lugar por amor a los cincuenta justos que estén dentro de él?
La preocupación de Abraham es una preocupación genuina, que muchos tienen presente en nuestros días, pero que parece que la mayoría no llega a entender lo que significa verdaderamente la justicia.
En segunda de Kefa 2:7, La Escritura define a Lot como un hombre justo.
Kefa Bet (2 Pedro) 2:7
7 Y libró al justo Lot, abrumado por la nefanda conducta de los malvados
Sin embargo, debemos recordar también que Romanos 3:12 nos dice lo siguiente:
Romim (Romanos) 3:10
10 Como está escrito: No hay justo, ni aun uno.
Esto puede generar cierta confusión, ya que a simple vista puede parecer contradictorio, pero debemos entender que la justicia puede ser enfocada de más de una manera.
Podemos hablar de la justicia de los hombres la cual es imperfecta a diferencia de la justicia divina, y la justicia divina aun siendo perfecta, puede ser enfocada de dos maneras. Una de ellas es la atribución de justicia a los hombres que buscan justificarse por sus propios méritos, la cual acarrea condenación y la otra es la atribución de justicia a los hombres que son justificados por medio de los méritos de Yeshúa nuestro Mesías, la cual otorga salvación y vida eterna. Con lo cual podemos tener tres enfoques diferentes.
Y con esto en mente podemos entender que La justicia de Lot, mencionada en segunda de Kefa 2:7, puede ser atribuida por los dos primeros enfoques, es decir o bien desde la perspectiva humana, o a través de los méritos de nuestro Mesías, pero nunca por sus propios méritos delante de Yahweh.
La Intersccion de Abraham
Volviendo al texto de la parashá, antes vimos como Abraham comenzó a interceder por los justos que pudieran haber en Sodoma, mencionando la posibilidad de que existieran cincuenta justos, a lo que: – Yahweh respondió:
Bereshit (Génesis) 18:26
26 Yahweh respondió: Si hallare en Sodoma cincuenta justos dentro de la ciudad, perdonaré a todo este lugar por amor a ellos.
Pero mientras avanzamos con la lectura, vemos que esto no parecía ser suficiente para Abraham, y siguió preguntándole a Yahweh si no perdonaría la ciudad si hubiera menos justos, mencionando progresivamente cantidades más bajas, como: cuarenta y cinco, treinta, veinte hasta llegar a preguntar sino perdonaría la ciudad si hubiera tan solo diez justos, declarándole Yahweh que sí, que perdonaría la ciudad si hubiera diez justos.
Y vemos que cada vez que Abraham hablaba, se expresaba con reverencia demostrando temor de no estar hablando de más. Lo que me hace recordar la parábola que nuestro Mesías enseño diciendo:
Luca (Lucas) 18:2-8
2 diciendo: Había en una ciudad un juez, que ni temía a Elohim, ni respetaba a hombre.
3 Había también en aquella ciudad una viuda, la cual venía a él, diciendo: Hazme justicia de mi adversario.
4 Y él no quiso por algún tiempo; pero después de esto dijo dentro de sí: Aunque ni temo a Elohim, ni tengo respeto a hombre,5 sin embargo, porque esta viuda me es molesta, le haré justicia, no sea que viniendo de continuo, me agote la paciencia.
6 Y dijo el Maestro: Oíd lo que dijo el juez injusto.
7 ¿Y acaso Elohim no hará justicia a Sus escogidos, que claman a Él día y noche? ¿Se tardará en responderles?
8 Les digo que pronto les hará justicia. Pero cuando venga el Hijo del Hombre, ¿hallará fe en la tierra?
Como mencione antes, queremos enfocar este estudio a la justicia de Lot, y no es el propósito enfocarnos en la justicia de Abraham, pero siempre es oportuno mencionar y recordar la importancia de insistir en la oración, con la debida reverencia, pero sin temor a incomodar a Yahweh. Porque Su paciencia es muy superior a la nuestra y Él no se cansa de escucharnos y si le pedimos, no para satisfacer nuestros caprichos, sino conforme a Su voluntad, Él se agradará de respondernos.
Lot es Avisado
Bueno, ahora veamos que nos dice el pasaje acerca de Lot, el capítulo 19 nos dice:
Bereshit (Génesis) 19:1
1 Llegaron, pues, los dos malajim a Sodoma a la caída de la tarde; y Lot estaba sentado a la puerta de Sodoma. Y viéndolos Lot, se levantó a recibirlos, y se inclinó hacia el suelo.
Sabemos que estos malajim [מַּלְאָכִים] = [ángeles o mensajeros] estuvieron antes en presencia de Abraham, y lo sabemos por lo que está escrito en Bereshit 18
Bereshit (Génesis) 18:2
2 Y alzó sus ojos y miró, y he aquí tres varones que estaban junto a él; y cuando los vio, salió corriendo de la puerta de su tienda a recibirlos, y se postró en tierra,
Bereshit (Génesis) 18:16
16 Y los varones se levantaron de allí, y miraron hacia Sodoma; y Abraham iba con ellos acompañándolos.
Estos dos malajim habían sido enviados por Yahweh para ver la maldad de Sodoma y avisar a Lot de que la ciudad sería destruida; entonces Lot les dijo:
Bereshit (Génesis) 19:2-3
2 y dijo: Ahora, mis señores, os ruego que vengáis a casa de vuestro siervo y os hospedéis, y lavaréis vuestros pies; y por la mañana os levantaréis, y seguiréis vuestro camino. Y ellos respondieron: No, que en la calle nos quedaremos esta noche.
3 Pero él porfió con ellos mucho, y fueron con él, y entraron en su casa; y les hizo banquete, y coció panes sin levadura, y comieron.
Aquí vemos que Lot era un hombre hospitalario, lo que nos muestra que era un hombre que se preocupaba por los demás, una característica bien importante para atribuirle a un hombre justo. Lot no quería que los mensajeros se quedaran en la calle sin un techo donde pasar la noche, y probablemente más aun, conociendo la maldad de los hombres en la ciudad. Seguramente Lot no solo quisiera ofrecerles comodidad, sino protección; aun así, el verso cuatro nos dice:
Bereshit (Génesis) 19:4-5
4 Pero antes que se acostasen, rodearon la casa los hombres de la ciudad, los varones de Sodoma, todo el pueblo junto, desde el más joven hasta el más viejo.
5 Y llamaron a Lot, y le dijeron: ¿Dónde están los varones que vinieron a ti esta noche? Sácalos, para que los conozcamos.
El Ofrecimiento de Lot
Cuando leemos estos versos, sin un contexto más amplio, puede parecer que esto no tiene nada de malo, y que pudiera ser apenas una formalidad del pueblo; pero cuando seguimos leyendo el pasaje y conocemos más detalles, podemos ver las verdaderas intenciones de estas personas.
Bereshit (Génesis) 19:6-8
6 Entonces Lot salió a ellos a la puerta, y cerró la puerta tras sí,
7 y dijo: Os ruego, hermanos míos, que no hagáis tal maldad.
8 He aquí ahora yo tengo dos hijas que no han conocido varón; os las sacaré fuera, y haced de ellas como bien os pareciere; solamente que a estos varones no hagáis nada, pues que vinieron a la sombra de mi tejado.
Este pasaje nos muestra que Lot conocía las intenciones de estas personas, y por el contexto podemos entender que lo que el pueblo quería realmente era tener relaciones con los dos mensajeros; por lo que Lot se propuso conversar con ellos para que no hicieran daño a sus huéspedes. Inclusive vemos que ofreció a sus propias hijas, para que hicieran con ellas como quisieran, según nos dice el texto. Y esto puede trasmitirnos la idea de que la justicia de Lot pudiera ser muy cuestionable.
¿Cómo podría valorar más a los huéspedes que a sus propias hijas?
Esta es una pregunta que yo mismo me hice, sin embargo, si lo analizamos con detenimiento; podremos notar que el verdadero propósito de Lot no era entregar a sus hijas, ya que el pueblo no tenía ningún interés en ellas, sino que lo que Lot intentaba, era trasmitir la idea de su buena disposición a través de ese ofrecimiento.
Lot debía saber que el pueblo, (que estaba completamente depravado) no tenía interés en tener relaciones con mujeres, sino que su interés era específicamente con los nuevos visitantes, por lo que ofrecer a sus hijas no era un riesgo, sino que solo quería demostrar buena voluntad, para que tal vez el pueblo se compadeciera de ellos.
Pero ellos le respondieron:
Bereshit (Génesis) 19:9
9 Y ellos respondieron: Quita allá; y añadieron: Vino este extraño para habitar entre nosotros, ¿y habrá de erigirse en juez? Ahora te haremos más mal que a ellos. Y hacían gran violencia al varón, a Lot, y se acercaron para romper la puerta.
Por lo que podemos notar en el texto, Lot procuró proteger a sus huéspedes; y cuando conseguimos entender que el ofrecimiento de sus hijas a los hombres del pueblo no fue con el propósito de hacerlo realmente, sino de apaciguar al pueblo y hacerlos desistir, entonces podemos describir a Lot como un hombre justo. No con la capacidad de obtener la salvación por sus propios medios, pero si en cuanto a querer actuar correctamente; y por esto los mensajeros le advirtieron de que Sodoma iba a ser destruida.
Bereshit (Génesis) 19:12-13
12 Y dijeron los varones a Lot: ¿Tienes aquí alguno más? Yernos, tus hijos y tus hijas, y todo lo que tienes en la ciudad, sácalo de este lugar;
13 porque vamos a destruir este lugar, por cuanto el clamor contra ellos ha llegado delante de Yahweh; por tanto, Yahweh nos ha enviado para destruirlo.
Y Lot intentó advertir a sus yernos, pero no hicieron caso, pensando que Lot estaba burlándose de ellos, por lo que solo salieron, él, su esposa y sus dos hijas. Mostrándonos que aun siendo un hombre que tomó malas decisiones, en su humildad reconoció la necesidad de salir de aquella ciudad. Y el texto nos menciona también que los mensajeros al enviarlos fuera de la ciudad le dijeron:
Bereshit (Génesis) 19:17
17 … dijeron: Escapa por tu vida; no mires atrás, ni pares en toda esta llanura; escapa al monte, no sea que perezcas.
Pero algunos versos más adelante, nos dice que la mujer de Lot miró atrás, y se volvió estatua de sal; por esto solo pudieron ser salvos él y sus hijas. También nos dice el texto que se fueron al monte por miedo de quedarse en Zoar y habitaron en una cueva.
La Descendencia de Lot
Lamentablemente las hijas de Lot tomaran la decisión de emborrachar a su padre, ya que pensaban que al estar ellas y su padre viviendo solos, no podrían tener descendencia, lo que ocasionó que cometieran este pecado tan grave, y como resultado,
Bereshit (Génesis) 19:36-38
36 Las dos hijas de Lot concibieron de su padre.
37 Y dio a luz la mayor un hijo, y llamó su nombre Moab, el cual es padre de los moabitas.
38 La menor también dio a luz un hijo, y llamó su nombre Ben-ammi, el cual es padre de los amonitas.
Y cuando escudriñamos Las Escrituras podemos notar como los descendientes de Lot a través de sus dos hijas, fueron dos pueblos idólatras y que en varias ocasiones estuvieron en guerra contra el pueblo de Israel. Entonces podemos notar que la justicia de Lot, (junto a la intercesión de Abraham) fue suficiente para alcanzar la misericordia de Yahweh y ser librado de la destrucción de Sodoma; sin embargo, podemos notar también que esto no fue suficiente para evitar el gran pecado de sus hijas que hizo que él también estuviera pecando.
Y esto debe ser un llamado de atención para todos nosotros.
Tiempos del fin
En el estudio de la parashá Noaj mencionamos que Yeshúa comparó Su regreso tanto con el tiempo del diluvio, como el tiempo de la destrucción de Sodoma y de Gomorra. Y entre otros pasajes leímos Lucas 17:28-30 donde Yeshúa dijo:
Luca (Lucas) 17:28-30
28 Asimismo como sucedió en los días de Lot; comían, bebían, compraban, vendían, plantaban, edificaban;
29 pero el día en que Lot salió de Sodoma, llovió del cielo fuego y azufre, y los destruyó a todos.
30 Así será el día en que el Hijo del Hombre se manifieste.
Cuando comparamos a Noé con Lot, podemos notar una diferencia importantísima, y es que, aun cuando los dos eran hombres que procuraban vivir rectamente, en el caso de Lot, no se preocupó de habitar y convivir con personas justas y temerosas de Yahweh, como lo era su tío Abraham. Sabemos que Lot y Abraham se separaron, por causa del conflicto que hubo entre sus siervos a causa del pasto para alimentar el ganado, que tenía cada uno. Y Abraham dejó que Lot decidiera que parte de la tierra quería para él y Abraham se apartaría al lado opuesto.
Bereshit (Génesis) 13:10
10 Y alzó Lot sus ojos, y vio toda la llanura del Jordán, que toda ella era de riego, como el huerto de Yahweh, como la tierra de Egipto en la dirección de Zoar, antes que destruyese Yahweh a Sodoma y a Gomorra.
Con esto vemos que Lot se preocupó más por su prosperidad que por un entorno lejos de personas impías. Y puedo notar como este patrón se repite en muchísimas personas en nuestros días, que valoran más su prosperidad o comodidad, conviviendo entre mucha inmoralidad antes de preocuparse por habitar en lugares donde puedan tener un ambiente más saludable.
Los dos Testigos
Tengamos en cuenta como Lot tuvo que ser alertado por los dos mensajeros que fueron enviados por Yahweh.
Cuando comparo esto con los dos testigos mencionados en Apocalipsis 11, pienso que muchos pueden estar queriendo reconocer quienes serán estos dos testigos, sin embargo, creo que lo más importante es que cuando se presenten no nos encontremos en la misma situación de Lot, conviviendo entre personas impías sin temor de Elohim.
Con esto no estoy diciendo que debamos vivir como ermitaños aislados de todos con miedo a contaminarnos, al estilo de los monjes budistas y tampoco que vivamos sin comunicarnos con nadie que no sea de nuestra fe, porque debemos ser luz y predicar siempre que sea posible el verdadero evangelio, pero debemos procurar convivir con personas temerosas de Yahweh, que quieran hacer Su voluntad y establecer relaciones sanas para fortalecer nuestra fe en la voluntad del Padre.
Yeshúa mismo fue ejemplo de esto al predicar a muchos, pero siendo Su convivencia principalmente con Sus apóstoles.
Hermanos el Padre es paciente con nosotros, pero la gracia y la misericordia no nos ayudaran sino tenemos una fe genuina, viviendo en santidad; entendiendo que Yahweh es Puro y Perfecto y que la salvación no es por nuestros méritos, pero tenemos el requisito de convertirnos en Sus siervos.
No es tiempo para la tibieza, confiemos verdaderamente en el poder del Padre y Glorifiquémosle con nuestras obras mientras esperamos el regreso de Nuestro Mesías o hasta que el padre determiné que se acaben nuestros días en este mundo.
Shabat Shalom
..
Recuerda La mies es mucha y los obreros pocos, apóyanos.
Parashá Infatil aquí
